jueves, 16 de junio de 2011

Belleza...


Belleza, hermosura… ¿quién no la admira? Sin embargo, no todos tenemos la misma definición de “hermoso”.
Para comenzar, yo marco diferencias entre hermosura y simple atracción, cosa que explicaré con un simple ejemplo. Si pasa por la calle una chica con ropa, actitud y cuerpo sugerentes, probablemente me dé la vuelta y mire. Muchos lo harían. ¿Es esto hermoso? Para mí, no lo es. Es una simple atracción a la vista, algo que no trasciende como gusto, algo que no pasa (al menos para mí) de unos cuantos segundos y se va. Así de efímeras son esas miradas y muchas veces he deseado que las personas sean un poco más reservadas. Es más, muchas personas se preocupan demasiado por su apariencia física, les gusta ser miradas, les gusta sentirse en el centro de atención.  Es importante la apariencia, sí, pero no lo es todo. Falta de autoestima, quizás. Y luego se quejan de que no las tratan como personas, de que no las tratan en serio, si se andan exhibiendo por doquier, ¿qué esperan?  Deberían emplear más tiempo en cultivar una personalidad, en leer, en cultura, antes que en la figura. Esto mismo es aplicable a otros terrenos, la música por ejemplo. No puedo evitar distinguir una perfecta armonía de notas o una mezcla entre los instrumentos precisos de algo que se mete en tus oídos a la fuerza, invade tus gustos y se aloja contra tu voluntad, algo que apenas podría llamarse música.
La belleza va más allá. La belleza te hace pensar en cada detalle, te hace admirar algo por un tiempo más prolongado, te cautiva hasta la médula. Y si te hace pensar, es porque trasciende los sentidos, si bien entra por los mismos. Personalmente, considero más sensual un torso descubierto que una vulgar minifalda. Prefiero una sonrisa o una mirada única a un escote. Y es que, uno es sensual, el otro es meramente sexual. Lo sexual llega a aburrir eventualmente, lo sensual se renueva, cada vez te da más razones para su atractivo.
Es por esto que me considero uno de aquellos (pocos, creo) que opinan que la belleza implícita está infravalorada y que ésta vale más que la belleza explícita, percibible por cualquiera sin mayor esfuerzo. Es en ir más allá donde se encuentra el meollo de lo estético. Es así cuando uno realmente percibe algo o alguien como único, incluso quizás sea así como alguien se enamore (o al menos sea un ingrediente importante en el amor), cuando logre ver aquello que nadie más puede. La belleza depende del ojo de quien la mire.
Así que para aquellos que piensan como yo, un consejo: no sucumban ante tanta banalidad que reina en el mundo. Sigamos viendo lo verdaderamente hermoso en las personas, en el arte, en el conocimiento mismo. Y tratemos de compartir estas ideas, porque a este paso el mundo se ahogará en la tormenta de trivialidades que nos amenaza.
Para aquellos que no piensan de esta manera, les digo lo que el zorro al principito: “Sólo se ve bien con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos”.

lunes, 6 de junio de 2011

Para aquella persona.


Sólo una persona me conoce realmente. Sólo alguien puede jactarse de apreciar mis cualidades y justificar mis debilidades, incluso mejor de lo que yo mismo suelo hacerlo.
Nadie más que tú ha logrado escarbar dentro de mi sobria personalidad, ningún otro ser ha podido ver más allá, nadie logró ingresar a aquel lugar en el que yo mismo a veces me pierdo. Aquel lugar prohibido, sumiso en lo más recóndito de mi alma, si es que tengo alguna. Aquel lugar olvidado, que reclamaba una caricia, un suspiro, que lloraba a escondidas para no ser olvidado, que esperó pacientemente  un largo tiempo sin más regocijo que la ilusión misma, ilusión que lleva ahora tatuado tu nombre como muestra de su sempiterno compromiso.
Sólo tú sabes lo que en verdad siento, sólo tú te burlaste de los obstáculos que yo consideraba infranqueables… ¡y vaya que amé dicha burla! Y no tienes idea de cómo amo cada tenaz célula de tu cuerpo que se aferraba a mí en busca de un poco de pasión, pasión que yo me negué a aceptar, cegado por razones que tú misma te empeñaste en soslayar.
Nadie más que tú supo encontrar todas y cada una de las llaves necesarias para abrirse paso entre todos los prejuicios y negaciones. Ningún otro ser ha llegado a conocer a aquel dulce y sensible niño, que con una mirada tuya se siente en el mismo limbo; aquel ingenuo ser a quien poco le importa que la felicidad sea pasajera, pues está dispuesto a apreciar cada momento a tu lado como el último, como el único, porque así se lo enseñaste. Porque no sabe hacer otra cosa. Porque es todo lo que me queda al ver derrumbadas aquellas murallas que impedían el acceso a mi verdadero ser tiradas abajo por ti. Aquellas murallas que construí durante tanto tiempo, guardando celosamente el secreto de su vulnerabilidad. Secreto que tú, de alguna manera, pudiste descubrir. Y no te reclamo absolutamente nada, al contrario, te agradezco mil veces, una por cada día que supiste resistir y abrazarme mientras me susurrabas aquellas palabras que sólo tú y yo sabemos.
Sin embargo, la verdad es que me encuentro solo, sentado, escuchando el famoso tercer Liebesträume, soñando con aquel amor maduro e incondicional que profesó Liszt, pensando en la promesa que se deja oír claramente entre todas las notas, arpegios y escalas. Pensando en que algún día, podré dedicarte estas líneas, podrá este texto tener tu nombre plasmado y podré dedicarte un par de lágrimas, como hasta ahora nunca lo he hecho.

miércoles, 1 de junio de 2011

Elecciones Perú SOS.


Porque estamos a puertas de elegir a nuestro presidente. Y eso no es ningún juego, ni es para tomarlo a la ligera ni para votar inseguros (sé que varios votarán inseguros). ¿Con qué moral más adelante podremos hablar de nuestro país si cuando tuvimos que elegir no supimos qué hacer?

Voy a tratar de explicar mi punto de vista con respecto a estas elecciones.

En primer lugar, ninguno de los 2 candidatos, a mí parecer, tiene la verdadera capacidad para llevar adelante al país. El señor Ollanta Humala parece un poco improvisado, recordemos que en el debate de primera vuelta se la pasó leyendo. Es difícil verle capacidad de líder diplomático. Y la señora Keiko Fujimori… de ella hablaré más adelante.

Pero de nada vale quejarse ahora de los candidatos, ¿porque no ganó mi candidato me cruzo de brazos y espero que los demás elijan, así si pasa algo, no será mi problema? Tampoco sirve decir que el Perú ya está jodido. Si pensamos de manera pesimista, pues hagamos nuestras maletas y vámonos del país de una vez. Nuestra patria necesita gente luchadora. Y como vuelva a escuchar “cáncer y sida”…

Entonces, paso a analizar a cada candidato. Primero, Ollanta Humala. Lo admito, fue difícil liberarme de todo prejuicio que tenía hacia éste candidato. Hace 6 meses, hubiera dicho “jamás votaría por Humala”. En mi defensa, es el mismo entorno el que te hace creer esto. Casi todos los medios de comunicación bombardeándote con la imagen satánica de Humala. A mi parecer, vivimos con una venda que nos ha puesto la sociedad y se requiere de mucha valentía para quitársela. Hasta que recordé que yo no suelo seguir al resto y trato de cuestionar todo. Y entonces llegó el clima político. Había que estar informado. Fui averiguando acerca de cada candidato, decepcionándome cada vez más, hasta que finalmente decidí liberar mi mente de prejuicios y analizar a Ollanta, comenzando desde su plan de gobierno.

Encontré una propuesta diferente, pero demasiado ambiciosa. Yo también creo que debería haber un cambio, pero no voy a votar por el primero que lo proponga. Los cambios duraderos deben hacerse paulatinamente.

Luego, pasé a preguntarme si realmente Humala instauraría un modelo chavista en el Perú o si desea un proyecto comunista. Para comenzar, para ese entonces ya sabía lo que era comunismo, por lo tanto, sé que ni Venezuela ni Cuba son comunistas, ni socialistas. Hasta dicen que Humala hará que todos ganen igual… ¡por favor! Ni en un sistema comunista, ni en su transición o socialista, todos ganan igual. Es más, en Cuba todos ganan CASI lo mismo, pues nadie vive del sueldo, el Estado les da todo (claro que me opongo a esto), pero mi punto no es criticar a los sistemas económicos, por ahora. Que quede claro, estoy en contra de Hugo Chávez, considero que se ha cegado de poder y ha olvidado el verdadero concepto de igualdad, sigue viviendo en el siglo XX y desearía revivir a la URSS. Ahora, vamos a ver si Ollanta puede instaurar un modelo chavista, o cuáles son las razones para creerlo. Una de las razones es que hace 5 años, en su campaña pasada, Chávez le dijo que era menester que ganara, profesó su apoyo abiertamente y Ollanta era recíproco con los saludos, claramente eran amigos. Yo no hubiera votado por él. Ahora bien, ¿creen que es posible que alguien cambie su discurso en 5 años? Yo creo que sí. Uno se puede moderar. Sin irnos tan lejos, Alan García lo hizo. Lo que no se puede hacer en tan poco tiempo es cambiar la ideología, pero vamos, claramente Ollanta sigue siendo de izquierda. Para hacer una comparación, Lula Da Silva, ex presidente de Brasil, entró como candidato de izquierda, también votaron con un poco de temor y bueno, ya sabemos cómo está Brasil en estos momentos (y sigue mejorando). Ojo, Humala aceptó en algún momento tener asesores brasileños. ¿Aún queda un poco de miedo? Pues bien, supongamos que Humala nos está engañando, que quiere convencernos a como dé lugar y llega al poder para estatizar todo. ¿Creen que ser presidente es ser Dios? Ser presidente no te da la facultad de hacer y deshacer como te dé la gana, para eso el poder legislativo modera al ejecutivo y hasta donde yo sé, Humala no tiene más del 50% en el Congreso, como sí lo tuvo Chávez (que entró en primera vuelta con casi el 60% de aprobación) y como sí lo tuvo Fujimori. Y tampoco creo que más de la mitad del Congreso apruebe la estatización. Es más, si Humala no cumple lo que dice, no respeta la democracia en algún aspecto… imagínense cuánta gente le va a saltar encima; casi el 40% del Perú ya lo odia. Si mete la pata, todo el pueblo le saltaría encima. Y al pueblo enfadado, nadie lo para.

Se le acusa a Ollanta de tener más de un plan de gobierno y está el temor de no saber cuál se va a aplicar. Pues bien, ¿desde cuándo hay una ley que obliga a mantener el plan de gobierno estático? Es más, yo consideraba su primer plan de gobierno algo alocado, demasiado ambicioso. Cambiar la Constitución, si bien yo estoy de acuerdo (la que tenemos es demasiado liberal, libre mercado por aquí por allá y el rol regulador del estado no interesa, además que es producto de una DICTADURA), obviamente casi toda la nación se opone. Algunos hasta creen que se puede meter y cambiar la Constitución así porque le da la gana. No señores, se hace falta un referéndum, el cual no creo que se aprobado durante un primer tramo de un supuesto gobierno nacionalista. Entonces, ¿no se puede ser ecléctico y mejorar un plan de gobierno? Que si no lo cambia, le increpan que es muy ambicioso, alocado e improvisado, que si lo cambia, le increpan dicho cambio, vamos, que por todos lados queda mal. Hay que pensar un poco, hay que ir más allá de lo que nos dicen.

También se dice que Ollanta fue un golpista, hasta terrorista por lo ocurrido en el Andahuaylazo. Tuve la suerte de escuchar por radio al mismo Ollanta diciendo su versión del caso. Él apoyó el hecho subversivo, el derecho de insurgencia que está estipulado en la Constitución, pero luego condenó la muerte de los policías. Por ello mismo, su hermano se encuentra en la cárcel, además dijo que no lo indultaría y que su hermano mismo ha asumido la responsabilidad del caso. Lo que es más, Ollanta dijo que tuvo un error al considerar el gobierno de Toledo como dictatorial y alejado del pueblo. Pero claro, sale Jaime Bayly atacándolo 3 semanas seguidas (o más, dejó de interesarme) y casualmente, cae en las encuestas. ¿Periódico llamado “Ollanta”? Mañana yo puedo sacar un periódico llamado “Bayly” donde critique a Keiko y no habría opción a reclamo pues Jaime Bayly no tendría nada que ver con el periódico en cuestión. Le pidió que pida disculpas, pero aparentemente no sabe que ya lo hizo. Libertad de expresión, ¿no? En un país donde ver televisión te vuelve más bruto en lugar de informarte, todo es posible.

Pero no me malinterpreten, no soy “Humalista” (ahora se le agrega la terminación “ista” a toda persona y se crean nuevas ideologías). Así como me liberé de todo prejuicio y pude ver la verdad de su partido y su plan de gobierno, veo sus debilidades. No veo en el señor Ollanta la figura indicada para representar a su partido. Me explico; en el debate del día domingo por segunda vuelta (que para mí fue decepcionante), Humala no respondía a los ataques directamente. Siempre se iba por la tangente o no era claro. Creo que yo lo hubiera podido defender mejor de lo que él mismo lo hizo. Repito, le falta la capacidad de líder para ser el presidente que nuestro país necesita. En primera vuelta, no vote por él y no me arrepiento de mi voto.

Sin embargo, comparado con la otra opción, Keiko Fujimori, claramente mi voto va para Ollanta Humala. ¿Por qué? Aquí las razones.

En primer lugar, Keiko representa al fujimorismo. Quien quiera alegar que Keiko es una persona totalmente diferente a su padre, solo ve lo que quiere ver. Keiko es el producto político de su padre. Fue primera dama en su gobierno. En los comerciales, se cuelga de sus logros. Si su nombre fuera “Keiko Sakazonapan” y no “Keiko Fujimori”, no estaría en segunda vuelta, ténganlo por seguro

Ahora bien, el fujimorismo fue una desgracia para el Perú. Lo único bueno que hizo el dichoso chino en 10 años de gobierno fue acabar con el terrorismo. Repito, fue lo único bueno. Dicen que recuperó la economía. Mentira. Lo que hizo fue “salir del paso”, vendió el Perú al mejor postor, trajo a todas las empresas privadas que pudo y por eso ahora mismo dependemos de la mano de los inversionistas EXTRANJEROS. Por culpa de Fujimori tenemos tantas universidades de tan baja calidad. Por él es que tenemos tanto peruano mediocre, que compra, mira y lee prensa sensacionalista, por culpa de él un bueno tiempo el programa de moda era el de Laura Bozzo. Es más, recordemos como entró a gobernar. Perdimos la oportunidad de tener a una gran figura como Mario Vargas Llosa, a pesar de que éste ganó el debate (lo cual indica que al peruano no le importan los debates) y decía lo que iba a hacer para salvar al Perú (la gente se escandalizó cuando Vargas Llosa propuso reinicia la economía, pero luego vino el chino con su “fujishock” y nos engañó a todos). Pero a base de una política clientelista, la expresión “roba pero hace obras” tuvo su máximo apogeo en la etapa fujimorista. Había dinero, entonces, para que el pueblo no se queje, compramos la prensa, les construimos carreteras, les regalamos comida, todos contentos; el pueblo mediocre y conformista no se dio cuenta de lo que pasó hasta que Fujimori ya estaba renunciando POR FAX.

¿Temen que Humala siga los pasos de Chávez no? He aquí unos datos interesantes. La Constitución del 93 fue creada por un autogolpe, desde que Fujimori manipuló los poderes, se volvió dictador y por ende, su Constitución debía servir a sus fines. ¿Venezuela les suena? Fujimori hizo posible la re-reelección (¿suena familiar?), la inversión privada a granel y el libre mercado sin control. ¿Quién se parece más a Hugo Chávez entonces?

Por favor, ¡FUJIMORI ES EL SÉPTIMO GOBERNADOR MÁS CORRUPTO DE LA HISTORIA… DEL MUNDO! Robó la escandalosa cantidad de 600 millones de dólares. Y para aquellos que alegan que Keiko es diferente a su padre… ¡ella dijo que su padre era inocente, que no había ni una sola prueba que demuestre su culpabilidad! Y por supuesto, cito mi fuente: http://www.youtube.com/watch?v=kL4ciDpKjuE&feature=player_embedded


Keiko se rodea de las personas que seguían a su padre. ¿Cómo pues, espera que creamos que es otra candidata y no representa al fujimorismo? Sinceramente, cuando hace poco menos de un año, Keiko anunciaba su candidatura, yo pensé que era broma, que los peruanos tenemos memoria, que sabemos ver la verdad más allá de lo que nos pintan. La hija de un dictador corrupto (por no decir genocida) como candidata… y ahora como posible presidenta. Y su hermano el más votado para el Congreso. No tienen sangre en la cara. Keiko se aparece a decir que es madre, cuando en el gobierno de su padre, su propia madre, Susana Higuchi, alega haber sufrido torturas.

Decepcionado me siento al ver que en verdad somos pocos los que entendemos la gravedad de la situación actual. La democracia peligra, sí, pero por culpa de esta señora que pretende regresar al país a una mafia, una dictadura, una política clientelista, donde el Perú seguirá siendo, como yo lo llamo, “la prostituta de Sudamérica”, donde los peruanos seguirán prefiriendo una carretera o una casa mal hecha antes que un libro, donde a los pobres se les da pescados pero no se les enseña a pescar, donde el crecimiento económico es aparente, pues siguen habiendo pobres sin oportunidades para salir adelante (pero contentos porque tienen su vaso de leche a la vuelta de la esquina).

¿Hasta cuándo entonces, la mediocridad peruana? ¿Por qué no darle la oportunidad a quien promete un cambio verdadero? ¿Por miedo? ¿Quién da más miedo realmente?. Lo peor es que las personas creen tener un juicio anti-humalista, cuando en verdad es la prensa quien impone esta clase de ideas y quienes nos quieren meter a todos dentro del rebaño y aquel que se aleje, será un chavista, un vil izquierdista, un tonto que desea cambiar el sistema. Por último, si no le terminan de creer a Humala, si están pensando viciar, tengan en cuenta que estamos en una situación crítica (como dijo Álvaro Vargas Llosa), les repito la frase que dijo Humala casi al final del debate: “De mí se puede tener dudas, pero de Keiko se tiene PRUEBAS”.

Que no se diga que no nos advirtieron. Que no se diga que el Perú no tuvo oportunidad. Que no se diga que no sabíamos lo que hacíamos. Que no se quejen luego de que el Perú sigue siendo un mendigo sentado en un banco de oro, rogando dinero a extranjeros.